Caleao: un pantano innecesario, pero un negocio provechoso

Por Juan Robles

Están convencidos de que España es un solar disponible para que los hormigoneros y los kilovólticos hagan sus grandes negocios y dupliquen beneficios año tras año.

Hace ya mucho tiempo, alguien dijo que todos estos personajes de la alta dirección de las empresas y de la economía del país, si los dejabas en el Sáhara, eran capaces de importar arena; por eso, los que ya peinamos canas, no nos sorprendimos mucho cuando empezaron a propalar por todas partes que en Asturias, donde llueve un día sí y otro también, había escasez de agua. Y, claro, allí estaban ellos para solucionarnos el problema: construir un nuevo pantano.

Que el lugar escogido para hacer su obra, y su negocio, fuera una zona de grandes valores naturales y paisajísticos, situada, para más inri, dentro de un parque natural, no era algo que les preocupase especialmente. Están acostumbrados a manejar el soborno y la amenaza desde siempre; la prevaricación y el cohecho son su permanente compañía. Y virtuosos de la manipulación de masas, ya casi tenían convencida a media Asturias de que si no se construye ese pantano habrá restricciones de agua durante el verano.

Pero hete aquí que un catedrático de la Facultad de Geografía de la Universidad de Oviedo se pone a investigar el asunto y redacta un informe y dice que la solución más racional para aumentar el suministro de agua a la zona central de Asturias es traerla de otro río de la región, el Navia, donde ya abundan los pantanos de único aprovechamiento eléctrico. Y que, por lo tanto, la construcción del pantano de Caleao carece de justificación. Además, el citado informe llama la atención sobre el mal uso, o abuso, de los embalses existentes, de los que casi el noventa por ciento se utilizan exclusivamente para la producción de energía eléctrica.

El autor del informe, Aladino Fernández, no puede ser denostado por los hormigoneros y los kilovólticos por ser un malévolo izquierdista o un despreciable ecologista, pues a su condición de destacado miembro de la comunidad docente universitaria asturiana une un prestigio profesional reconocido e intachable, y añade en su larga trayectoria personal la condición de haber sido alcalde socialista de Langreo, importante municipio minero de la zona central asturiana.

Por si esto fuera poco, este informe ha sido hecho suyo por el Consejo Económico y Social asturiano.

Señores hormigoneros, señores kilovólticos: tienen un problema.