Fallece electrocutado un trabajador
de una subcontrata de HC Energía

Por Julio A. Suárez.

El joven trabajador Daniel González Menéndez, de 22 años, falleció en las primeras horas de la tarde del pasado día once de noviembre a consecuencia de una parada cardio-respiratoria por electrocución. El trabajador se encontraba realizando sus labores en una torre de media tensión en el pueblo de Bodenaya, en el concejo asturiano de Salas.

Según informes atribuidos al atestado policial, a los trabajadores se les había dado permiso para trabajar en esa línea, por lo que cuando iniciaron sus labores estaban convencidos que ya se había cortado el suministro eléctrico a la misma. El cadáver del infortunado trabajador permaneció “pegado” durante bastante tiempo a la columna eléctrica y colgando por el arnés de seguridad.

La compañía eléctrica HC Energía, conocida antes como Hidroeléctrica del Cantábrico, filial de la portuguesa EDP, no ha emitido ningún comunicado sobre este grave accidente. El comité de seguridad de la empresa sí que parece haberse reunido y, según parece, los representantes de la empresa trataban de culpabilizar al trabajador fallecido por no haber seguido los protocolos estipulados. Otras fuentes consultadas señalaron que la presión ejercida por HC Energía sobre el personal de subcontratas para aumentar la productividad, incluso haciendo la vista gorda de forma habitual sobre las exigencias de seguridad, estaría en el origen de este gravísimo y triste accidente.

El joven trabajador pertenecía a la empresa Tensa, SA, fundada en 1976. Esta subcontrata trabaja para las grandes compañías eléctricas en tareas de instalación y conservación de líneas eléctricas aéreas y subterráneas de baja y alta tensión.

Tendidos Eléctricos del Norte, SA (Tensa) fue adquirida en 2006 por la portuguesa Electricidade Industrial Portuguesa (EIP). En 2007 EIP poseía el 85% del capital de Tensa, que contaba con dos centenares de trabajadores y había facturado más de veinte millones de euros. EIP fue fundada en 1956 y es una de las empresas lusas más importantes en construcción de líneas eléctricas, electrificación ferroviaria y subestaciones.

En el juzgado de instrucción del partido judicial no se tenía noticia, tres días después del accidente, de que se hubiera iniciado la apertura de una investigación. También se carece de noticias de si la fiscalía y la Inspección de Trabajo han tomado cartas en el asunto.

Las organizaciones sindicales no realizaron ninguna denuncia ni convocaron ningún acto de protesta.

El personal de HC ni paró ni guardó, siquiera, un triste minuto de silencio en homenaje este pobre trabajador que perdió la vida en un accidente perfectamente evitable.