En nuestra región, más de 75.000 pensionistas, en su mayoría mujeres, reciben menos de 600€ al mes
"Estimado/a pensionista"

Por Ana I. Martín.

Estimado/a pensionista. Así se inicia la carta con la que la ministra de Empleo y Seguridad Social se dirige a los pensionistas para informarles de la revalorización de su pensión en 2018. Un año más el incremento es un miserable y burlesco 0,25%. Tras la exposición de una serie de grotescas lindezas, a modo de justificación, se despide con un cordial saludo y sus mejores deseos para el año que comienza.

En más del 50% las pensiones son de por si irrisorias, y está claro que no permiten tener una mínima calidad de vida. Incrementarlas con una cantidad que no llega ni a 2€ es un insulto y desprecio hacia quienes las perciben. Tampoco es satisfactoria la situación del resto de los pensionistas.

Con el gobierno de Zapatero, en 2011, las pensiones se congelan, lo que puso fin a 25 años de subida garantizada por ley. Con el gobierno de Rajoy, en 2012 y 2013, las pensiones contributivas se incrementaron en un 1%, y poco más el resto. Ya por debajo del IPC. Este es el quinto año consecutivo en el que las pensiones suben un 0,25% , lo que es igual a cuasicongelación. En la actualidad nos dicen que la recuperación económica es un hecho, y el conjunto de bienes y servicios, llamado “cesta familiar o de la compra” eleva sus precios “alegremente”.

Es de justicia elemental el mantener el poder adquisitivo de los pensionistas aplicando una actualización digna vinculada al IPC. Para ello es necesario eliminar los dos puntos principales de la reforma de 2013: el Indice de Revalorización de las Pensiones, que vincula el incremento de la prestación al estado financiero del sistema y el Factor de Sostenibilidad (que lo introdujo el PSOE en 2011 y que no llegó a concretarse hasta la reforma del PP en 2013) que vincula la cuantía de la pensión a la esperanza de vida del trabajador en el momento de su jubilación.

La salud financiera de la Seguridad Social es penosa. El número de parados sigue siendo alto, por mucho que en 2017 se hayan creado 600.000 empleos. Además, ¿cómo es la base de cotización de los trabajadores?, la calidad de los empleos es mediocre, los salarios son bajos y los contratos son de corta duración o en jornada reducida. Por otra parte, somos un país envejecido.

Es imprescindible encontrar la fórmula para mejorar la lamentable situación de los pensionistas, actuales y futuros, como manifestaba la pancarta que portaba una joven en la protesta del 17 de marzo, “GÜELITO, POR LOS DOS”. La reforma ha de hacerse por consenso entre todas las fuerzas políticas dentro del marco del Pacto de Toledo. Hace falta intención. La solución podrá no ser fácil, pero si posible, y no ha de quedar supeditada al vaivén electoral. El número de pensionistas asciende a 8,5 millones (9,5 millones de pensiones). No ha de pasar por la subida de impuestos, directos ni indirectos, al ciudadano de a pie, ni afectar a Sanidad, Educación y Dependencia, ya deficitarias.

El gobierno responde ante las manifestaciones de protesta nacionales. Así, en febrero, Rajoy llamó al ahorro para complementar las pensiones, invirtiendo en planes y fondos. ¿Ahorro?, para una mayoría no es un asunto fácil. Incluso múltiples ahorradores modestos perdieron el dinero invertido en acciones del Banco Popular. Una curiosidad. ¿Por qué importantes organismos del sector público retiraron fondos antes de la intervención y ridícula venta al Santander? Montoro ofrece una deducción del IRPF para que los pensionistas de “cierta edad” puedan afrontar los gastos inherentes a la vejez. Que despropósito, el 63% de los pensionistas no tributa el IRPF.

En marzo, ante la presión en las calles, el gobierno se inclina por la aplicación de tres medidas que beneficiarían al 65% de los pensionistas. – Concesión de un subsidio mensual, sin concretar, para los pensionistas que hasta ahora no tributan el IRPF, es decir, aquellos con prestaciones anuales de hasta 12.000 € (14 pagas).—Rebaja en el IRPF a los pensionistas que cobran rentas anuales de hasta 17.000€, sin concretar.—Mejora de las pensiones mínimas y de viudedad, la primera sin concretar. Esta última medida es básica. Estas propuestas están vinculadas a la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado para 2018. Es evidente que se trata de un parche. La actualización de las pensiones seguirá siendo del 0,25%.

En nuestra región, más de 75.000 pensionistas, en su mayoría mujeres, reciben menos de 600€ al mes. Las ayudas económicas para la atención de personas dependientes en su domicilio se demoran en, al menos, 9 meses. Eso sí, se plantean la cooficialidad del asturiano. Por otro lado, por citar solo otro ejemplo, la subida del sueldo de ministros, senadores y diputados será del 1,75%. Mientras tanto, el día 20 de febrero se celebró el Día Mundial de la Justicia Social.